El objetivo final para nuestras pacientes es proporcionar una salud integral tanto a la madre como al bebe. Para ello el equipo de expertos de nuestra unidad de medicina fetal cuenta con la más avanzada tecnología de ecógrafos de última generación y alta resolución, para realizar estudios completos. También se realizan consultas de segunda opinión en pacientes con sospecha de patología fetal.
La ecografía es la prueba diagnóstica de “oro” en todas las embarazadas para diagnosticar de forma correcta el bienestar del bebe y para descartar malformaciones. Por ello se realizan ecografías a lo largo de todo el embarazo.
En las primeras semanas de embarazo el objetivo es ver que el embrión esta bien implantado. Más tarde se realizarán:
- Ecografía del primer trimestre (12-14 semanas): Se estudia el grosor del pliegue nucal ó translucencia nucal. Este grosor cuando esta aumentado es un “chivato de sospecha” de posibles anomalías cromosómicas o cardiopatías. El diagnóstico definitivo de las cromosomopatías (100%) se realizará estudiando células del feto o en vellosidades coriales y el diagnóstico de cardiopatías se realizará mediante nuevas ecografías.
- Ecografía morfológica del segundo trimestre (19-22 semanas): Se estudia el desarrollo del bebé y se mira de forma muy detallada toda su anatomía para descartar malformaciones. Incluye ecocardiografía (estudio del corazón) y neurosonografía (estudio del cerebro). También se valora el riesgo de que la madre tenga una preeclampsia (aumento de la tensión). Es cuando se determina el sexo del bebé.\n\n
- Ecografía del tercer trimestre (32-34 semanas): Se vigila el bienestar del niño en el vientre materno mediante el estudio de sus movimientos, el crecimiento y su peso estimado. También se mira su presentación de cara al parto (si esta colocado de cabeza), el estado de la placenta y del líquido amniótico. Finalmente el estudio Doppler permite comprobar que el oxigeno y el alimento llegan al bebé correctamente. También es posible el diagnóstico de malformaciones que no son expresivas o “no dan la cara” hasta el tercer trimestre.